Resumen de la Ponencia:

Objetivo. Describir y analizar cómo el crecimiento urbano desordenado y la exclusión social que se vive en el municipio de Centro, Tabasco, han sido un factor preponderante para la proliferación de iglesias cristianas no católicas en la periferia de Villahermosa, Tabasco. Metodología. A partir de la etnografía, se reflexionó sobre los múltiples aspectos que conforman el fenómeno social. Resultados. La periferia de Villahermosa se caracteriza por la prominente heterogeneidad religiosa que presenta y por sus altos índices de vulnerabilidad social, respecto a la propia ciudad de Villahermosa. Conclusiones. La diversificación religiosa en la periferia de Villahermosa es resultado del desarrollo social dispar entre los habitantes de una ciudad específica, donde se expanden las doctrinas cristianas no católicas en los sectores sociales menos favorecidos. Esta noción adquiere validez, porque sabemos que un sujeto marginado, segregado, excluido, es más propenso a poner su vida en manos de Dios.

Resumen de la Ponencia:

A convocação do Papa Francisco aos jovens do mundo para pensar outra economia tem reverberado de diferentes maneiras na juventude católica. Inspirado nos ensinamentos de São Francisco de Assis, o papa entende que o modelo global atual é inviável do ponto de vista humano e da natureza. Francisco propõe aos jovens pensar uma economia “com alma” em favor da vida e não da morte, em vistas da inclusão e não da exclusão, uma economia preocupada com a natureza e que não a explore sem limites, enfim, uma economia que humaniza e não desumaniza. Apesar de predominar no Vaticano a lógica do capitalismo inclusivo, parte da juventude católica brasileira interpreta esse chamado do papa numa perspectiva anticapitalista. Estes jovens articulam a ideia do “realmar a economia” em um exercício de reintegração da ética com o consumo e produção. Eles tomam como referência as experiências concretas já existentes no continente latino-americano, como a da economia solidária, e assumem o viés da democracia participativa. Nos caminhos do bem-viver, essa juventude entende que a vida comunitária exige o “ter em comum”. Destarte, esta comunicação apresenta as análises iniciais de entrevistas aplicadas em lideranças jovens que participam da ABEFC - Articulação Brasileira pela Economia de Francisco e Clara. São analisados os perfis, principalmente a trajetória religiosa, de sete lideranças jovens de diferentes contextos do catolicismo brasileiro que participam da iniciativa papal. Intenta-se entender a concepção desses jovens acerca da Economia de Francisco, sua participação na ABEFC, a recepção da proposta no país e suas perspectivas quanto à transformação da economia global. Constata-se que, apesar de herdeiras dos princípios do Vaticano II e do diálogo com a Teologia da libertação, trata-se de uma juventude predominantemente branca, cisgênero, heterossexual, composta por jovens-adultos (acima dos 25 anos), de classe média, com graduação ou pós-graduação e forte presença no sudeste e sul do país. São majoritariamente jovens católicos praticantes, mas com baixa capilaridade nas comunidades católicas, uma juventude à margem das estruturas oficiais da instituição, principalmente das paróquias. No entanto, esses jovens rejeitam a economia de mercado por considerarem que ela perpetua a exclusão. Por isso, almejam um modelo econômico socialmente justo que garanta vida digna para as pessoas e respeite ao meio ambiente.

Resumen de la Ponencia:

Históricamente, el cristianismo protestante se ha desarrollado de la mano de un fenómeno musical que lo ha caracterizado y que, a lo largo de los siglos, ha conformado una liturgia y un momento de carácter sacro muy particular de dicha religión. Es en la Reforma Protestante donde esta música adquiere su forma más conocida hasta hoy: la del himno, obra musical consagrada en el cristianismo protestante durante la modernidad, caracterizada por una fuerte carga doctrinal y por una dinámica musical discreta, pero mayor y disruptiva frente a sus antecesoras.Durante los últimos 50 años, y a la par del advenimiento de nuevas formas que ha adquirido el capitalismo voraz, este género musical ha vivido su época de mayores cambios. Nuevos ritmos, y letras, nuevas formas de producción, distribución y consumo han plagado a la música cristiana y construido un nuevo modo de hacer alabanza en el protestantismo contemporáneo. Estas formas, caracterizadas a grandes rasgos por romper con la forma tradicional del himno moderno y adaptarse a las tendencias musicales, políticas y estéticas del mercado y del momento, es lo que se denomina en esta ponencia como el Worship. El desarrollo del Worship en América Latina es un problema para investigar porque implica un proceso de mercantilización (en el marco de una sociedad global), en el cual el Worship disfraza de un estilo musical, y de una identificación religiosa-espiritual, a un modo de vida acorde a las métricas del capitalismo. Este tipo de música, entonces, se convierte en un instrumento reproductor de ideas, comportamientos, y posturas políticas, económicas y culturales favorables a una hegemonía cultural, política y económica que, incluso, contradice los principios del mismo cristianismo protestante. Ergo, bajo la legítima bandera de una fe, las personas pueden reproducir irreflexivamente todos esos valores mediante sus consumos y construir así su identidad cristiana con una serie de principios distorsionados o no necesariamente fieles a lo que dicen profesar. Por ello, es necesario reflexionar en torno a este proceso de mercantilización que reflejan las contemporáneas expresiones de la música cristiana, la cual hoy habita en el terreno de los productos de consumo y las industrias culturales. Se debe valorar, a partir de categorías como el habitus de Pierre Bourdieu (2010) o el aura de Walter Benjamin (2018), cómo este fenómeno incide en la forma en que las personas cristianas consumidoras de esta música construyen su identidad (religiosa, sobre todo) ajustando sus percepciones religiosas a la dinámica consumista del Worship, cuya naturaleza es más económica que espiritual. Esto significaría, además, un nuevo triunfo del capitalismo sobre un área de la vida considerada particularmente íntima y distanciada históricamente del lucro. 

Resumen de la Ponencia:

As reflexões aqui apresentadas fazem parte dos estudos realizados na Rede de Pesquisa de Turismo Religioso no Nordeste Brasileiro – REPTUR – Brasil, que tem por objetivo analisar as ações de diferentes grupos – religiosos, políticos e empresariais – no processo de divulgação dos locais de culto e, consequentemente, na promoção do turismo religioso em nove estados que compõem a região do Nordeste. Particularmente, nesta comunicação, são discutidas as (re) configurações imagéticas das festividades religiosas católicas associada ao turismo religioso no estado do Rio Grande do Norte-RN, durante o período da pandemia e pós-pandemia causada pelo Coronavirus 19 (Sars-Cov-2), nos anos de 2020/2021 e início de 2022. Fatores de diferentes ordens se mostraram centrais neste processo. Entre eles destacam-se: a) as conexões estabelecidas entre os devotos envolvidos nos rituais de celebração; b) o papel desempenhado pela Igreja Católica; c) ação de gestores das políticas de turismo na divulgação de um destino turístico. Recorrendo-se as plataformas digitais de comunicação midiática - web, redes sociais e formatos virtuais de propaganda e marketing-  apresentamos análises da formação do turismo religioso no estado do Rio Grande do Norte – RN a partir de estudo de caso múltiplo com abordagem qualitativa resultante da observação, questionários via comunicador instantâneo (messenger), eventos online e discussões no meio virtual. As (re) configurações imagéticas das festividades foram fundamentais neste processo por possibilitar ao seu público, novas formas de se relacionar com o sagrado e incentivar a criação novos destinos turísticos.    

Resumen de la Ponencia:

El pentecostalismo se autoerigió como la religión de los pobres. Una de las cofundadoras del movimiento pentecostal Natalia de Arancibia, fiel al mito fundacional, destaca: “Dios está obrando (...) en los viles y miserables, en aquellos de los cuales hablaba Pablo, ser como basura, ser la hez del mundo, pero imitadores de Dios como hijos amados”. Luego, uno de los fundadores del pentecostalismo intracarcelario, Braulio Vergara en el año 1925, cuyo nombre de esta iglesia intracarcelaria se llamaba Nuevo Edén, destacaba: (…) los pobres de las cárceles son por general seres desprovistos de bienes espirituales y materiales, y a quienes podemos decirles igualmente: “No tenemos plata ni oro; ni siquiera influencias en la tierra para conseguiros la libertad que anheláis; pero lo que tenemos os damos: el Evangelio; las buenas nuevas para los pobres, la sanidad a los quebrantados de corazón, el pregón de libertad a los cautivos y la predicación del año agradable del Señor”. Pese que hoy por hoy, es difícil describir al pentecostalismo como la religión de los pobres, no obstante, ha crecido su influencia religiosa al interior de las cárceles, de una población de más o menos de 100.000 personas, el 40 % se declara evangélico, mientras que en la sociedad en general ha disminuido de un 18% en el año 2010 a un posible 12% en el año 2020. Lo que significa que el pentecostalismo es un discurso religioso que atrae a los pobres por su sentido comunitario, pero una vez que estos pobres se movilizan socialmente o mejoran sus condiciones sociales y económica, el discurso religioso se vuelve poco atractivo. De este modo, el objetivo de esta ponencia es describir ¿por qué el pentecostalismo es atractivo para una población que vive en la pobreza, la discriminación y la estigmatización, pero ahuyenta a los sectores medios, profesionales o social y económicamente estables?

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En la experiencia de encarcelamiento participan diversos actores, no obstante, para la presente ponencia pretendo enfocar la mirada en las mujeres que a lo largo de un tiempo determinado han experimentado la cárcel desde dos escenarios distintos y confluyentes. Uno de estos escenarios da cuenta de la realidad de las mujeres encarceladas en las tres principales cárceles del norte de Chile. Y que se congregan en las distintas actividades organizadas a través de las capellanías evangélicas en los penales de mujeres. Logrando describir su experiencia de conversión y religiosa dentro de la cárcel, identificando sus principales dificultades y bienestar establecido por medio de su nueva vida como convertidas frente al resto del penal, sus familias, congregación. Esto es, como viven la cárcel y la propia religión.Y desde el otro escenario se observa a las mujeres que integran las capellanías carcelarias evangélicas, las agentes pastorales que asisten espiritualmente a las mujeres encarceladas. Mujeres con una amplia trayectoria en distintas congregaciones evangélicas y que tras diversas experiencias carismáticas inician su trabajo en el ministerio carcelario. En su mayoría son mujeres acordes al perfil ampliamente descrito de la mujer pentecostal, de clase baja o media baja, dueñas de casa o trabajadoras dependientas a cargo del cuidado de sus familias y ampliamente activas en sus congregaciones. Mujeres de diversas edades, de diversas congregaciones, de primera o segunda generaciones en el pentecostalismo. Junto con esto, la mayoría de los relatos de estas mujeres muestra una experiencia religiosa y espiritual que marca la decisión de iniciar en este trabajo carcelario.Pero lo que se pretende sobresaltar es la construcción de una comunidad de mujeres basado en la fe pero también en la solidaridad desde las experiencias en comunes desde su género. Las mujeres encarceladas no son solo almas pecadoras que necesitan redención, no son solo personas que necesiten ser ayudadas para su rehabilitación y posterior reinserción, son mujeres como ellas mismas, como las propias agentes pastorales, que han experimentado sus mismas condiciones de pobreza, de sufrimiento y se enfrentan a los mismos riesgos y condiciones de género. Pero entienden que la gran diferencia está en su experiencia de conversión, en donde ven en sus hermanas encarceladas la vida que pudieron tener sin Dios. Y para las encarceladas las hermanas agentes pastores les muestran la vida que pueden tener con Dios. Y en esta dinámica de posibles alternativas de cambios de roles en una proyección en la vida de la otra, construyen una red social y simbólica basada en la mutua compasión y solidaridad desde la construcción como mujeres pentecostales. 

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Esta ponencia analiza la Fiesta de los Manacillos de la vereda de Juntas de Yurumanguí (Buenaventura, Colombia), celebrada entre el 25 de marzo y el 1 de abril de 2018 (Semana Santa) y el contexto local de conflicto armado. La cuenca del río Yurumanguí es un territorio colectivo de comunidades negras ubicado en el Pacífico colombiano que desde 1980 ha tenido presencia de distintos grupos armados que se disputan la zona para realizar actividades ligadas al narcotráfico. Cada año en época de Semana Santa, Juntas es escenario de fiesta: la pasión, muerte y resurrección de Cristo es recreada por la comunidad a través de cantos fúnebres, el Matachindé, procesiones y el juego de los manacillos. Los manacillos son seres sobrenaturales o espíritus festivos que personifican a los judíos que juzgaron y asesinaron a Jesús; son representados por hombres con máscaras de madera y trajes de cabuya, que mediante el baile y el rejo incentivan la fiesta y amedrantan a la comunidad.En el análisis de la fiesta tengo en cuenta los planteamientos de Víctor Turner sobre los ritos de paso y la definición de performance de Diana Taylor. El primer concepto me permite analizar la fiesta como un ritual que recrea el paso de la vida a la muerte, y nuevamente a la vida, pero renovada –separación, el margen (liminalidad) y agregación-, mediante el dogma de la resurrección de Cristo. Mientras que el concepto de performance, me aporta herramientas para entender la fiesta como prácticas corporizadas de saber social que son transmitidas y reactivadas de generación en generación, así como acciones de resistencia y expresiones de identidad. Este estudio encuentra que la Fiesta de los Manacillos es una performance que visibiliza la comunicación constante entre los mundos físico, social y espiritual en el territorio; además, un espacio liminal en medio de la guerra, que promueve el respeto por el territorio, la salvaguarda de las tradiciones y la resistencia a la guerra. En el ritual, el triunfo de la vida sobre la muerte del dogma de la resurrección de Cristo se materializa en la frase que vociferan los participantes al cantar el Matachindé: “Viva Dios, muera Barrabás”. En el contexto político y armado local, Dios hace alusión a la autonomía de los habitantes; y Barrabás, a la guerra y los grupos armados. Sin embargo, esta fiesta no es la única acción performativa local de resistencia, existen otras fiestas, el ejercicio de la pesca, la agricultura, la minería artesanal, acciones políticas y recursos legales que se suman al repertorio. Todas estas acciones han permitido que los/as lugareños/as ejerzan su autonomía territorial, permanezcan en el territorio y no cedan a las coacciones de los grupos armados.

Resumen de la Ponencia:

Vivir en condiciones de marginalidad y pobreza implica expectativas muy distintas cuando se es parte de una comunidad religiosa pentecostal. Participar del culto y prácticas religiosas de una congregación cristiana supone compartir membresía, no sólo a una comunidad protestante, sino a una red de intercambio que, bajo ciertas condiciones temporales, puede tener efectos positivos en términos de movilidad social intra e intergeneracional.Diversos estudios han demostrado la importancia de las redes sociales de intercambio y aprovisionamiento para comprender las condiciones de existencia y la reproducción social de distintos estratos sociales. Esta ponencia presenta resultados preliminares de un estudio etnográfico sobre el don o, mejor dicho, la ofrenda y las redes de apoyo en una comunidad bautista-pentecostal en Guadalajara, Jalisco; compuesta por fieles de distintos orígenes sociales.Se encuentra que, lejos de ser un fenómeno meramente religioso, el protestantismo se inserta en complejas dinámicas sociales, urbanas y económicas. Se evidencia, por ejemplo, un modo de sociabilidad urbana atípico tanto por el encuentro e interacción de sujetos con diametralmente distintos rangos de ingreso, cómo por los ideales colectivistas y la centralidad del don cómo medio de relación con el otro.Asimismo, a partir de la pandemia por Covid-19, se muestra la importancia de la red de apoyo protestante en paliar la crisis y asegurar el aprovisionamiento de los fieles que fueron más afectados. Más allá del acompañamiento y apoyo en la gestión emocional, se revela la función asistencialista y redistributiva que adopta la institución religiosa a nivel local y autogestivo; labores que son atribuidas al Estado regularmente.De tal manera que vincular religión a la discusión de las relaciones de clase vuelve posible comprender de una manera más compleja la desigualdad social. Pues, las relaciones entre la clase media y los estratos más bajos, lejos de ser meramente económicas, extractivistas o antagónicas, se presentan más complejas al incluir regalos, donaciones, favores y, además, intercambios personales de amistad.Distintos recursos que, más allá de paliar la miseria o reducir la vulnerabilidad, facilitan biografías de movilidad social ascendente. Sobre todo entre los fieles más jóvenes y con mayor grado de integración y tiempo de pertenencia a la red de apoyo que tiene lugar a propósito de la congregación.