Resumen de la Ponencia:

A quince años de la aprobación de la ley de Educación Sexual Integral (26.150) en Argentina salieron a la luz situaciones de violencia de género en escuelas de la provincia de Córdoba. A través de denuncias y movilizaciones organizadas por estudiantes se dieron a conocer maltratos, acosos y abusos. Estas acciones se dan en un contexto de fuerte protagonismo de las jóvenes quienes, a partir del 2015 con la primera marcha “Ni una menos” hasta las masivas movilizaciones para aprobar la ley de interrupción voluntaria de embarazo (IVE), instalaron en la agenda pública temas de género y sexualidad. El objetivo de esta ponencia es reflexionar sobre las violencias de género en los espacios escolares, a través de los relatos de jóvenes y familias que aparecieron en los medios de comunicación locales durante el mes de octubre del 2021. A lo largo de este trabajo articularemos las narrativas con reflexiones conceptuales sobre la problemática, con el objetivo que sean un insumo para pensar políticas de vida (Mattio, 2018) para su prevención y erradicación. En primer lugar, situamos estos testimonios en una sociedad que sigue produciendo y reproduciendo violencias patriarcales a través de múltiples dispositivos de desigualación (Fernández, 2009). Así, los relatos son actos públicos que permiten des-privatizar y nombrar las violencias (Fernández, 2009; Borzachiello, 2016), constituyéndose en una fuerza activa capaz de construir una comunidad emocional (Jimeno, 2019). A continuación, vincularemos estos relatos con la Educación Sexual Integral (ESI), entendiendo que es un derecho de lxs estudiantes y una responsabilidad para las instituciones educativas. No obstante, su implementación es desigual ya que cada institución se caracteriza por adaptaciones y dinámicas propias. En la provincia de Córdoba, un informe del Programa ESI (2016/2017) del Ministerio de Educación señala que uno de los temas prevalecientes en las áreas curriculares donde se trabaja ESI fue la “violencia de género” (86% de relevancia). Al respecto, nos preguntamos: ¿La implementación de la ESI y los activismos juveniles impactan en la sociabilidad, específicamente, en los umbrales de tolerancia respecto a la violencia de género? Por último, si las violencias de género pueden leerse en el entramado de la necropolítica (Valencia Triana, 2012) entendida como un engranaje económico y simbólico que produce códigos, narrativas e interacciones a través de la muerte; las resistencias ante esta maquinaria de “masacre de los cuerpos” (Mattio, 2018) pueden comprenderse como políticas de vida. Es así, que la Educación Sexual Integral y los activismos juveniles, como prácticas sociales críticas a las violencias patriarcales son una política de apuesta por vida (Espósito, 2011). 

Resumen de la Ponencia:

El año 2018, se planteó la Estrategia Comunitaria, desde el Ministerio de la Mujer y poblaciones vulnerables - Programa Aurora, y se ejecutó en los diversos distritos de Lima, como San Juan de Lurigancho desde su Centro de Emergencia Mujer. Esta consistió en afianzar la ejecución de acciones para incorporar la temática de prevención de la violencia de género en diversas instancias del distrito. En cogestión con las organizaciones y agrupaciones de la sociedad civil, desde un abordaje multidisciplinario de profesionales de las ciencias sociales, se validan el enfoque e instrumentos para la prevención de la violencia a la mujer especialmente en redes, instancias decisorias, organizaciones y también, en algunas empresas privadas, Ejemplo IVC.  Su desarrollo se planeó en tres etapas, la primera la Incorporación participativa y gradual, desde la dinámica de los actores, de la variable prevención de la violencia de género en los instrumentos de planificación, de las colectividades, instancias decisorias y empresas. La segunda, el acompañamiento a la implementación y monitoreo de acciones de prevención de la violencia de género en las prácticas cotidianas de las colectividades y empresas. La tercera la medición y evaluación de los resultados: en el caso de las empresas beneficio para trabajadores, empresariado y consumidores. En cuanto a la colectividades los resultados entre los usuarios, voluntariado, gestores sociales y ciudadanía, Se institucionalizo a través de sus propias normas de gestión empresarial, a través de publicación en su página web de tales normativas.  Para conocer los conceptos que explican la violencia de género se incorporaron los planteamientos de Bourdieu, De Barbieri y Scott y Segato, los cuales permitieron plantear las acciones de prevención. Sin embargo, en el contexto del Covid – 19, los años 2020 y 2021 se rediseño las acciones la primera y segunda etapa. Por ello, se establecieron nuevas formas de relacionamiento entre los actores, con énfasis en la sensibilización para prevenir la violencia, acompañamiento personalizado a través de nuevos medios y tecnologías que permitieron ejecutar acciones para validar la incorporación de la temática de prevención de la violencia en las organizaciones del distrito y en agrupaciones de la sociedad civil, todo ello con protocolos de cuidado de la población en el contexto de la pandemia. De forma escalonada y con trabajo comprometido y participativo entre servidores públicos, decisores, empresarios y corporativos, se buscó implementar las variables de prevención de la violencia de género, por un lado, en los instrumentos de planificación de las organizaciones y empresas y por otro lado, reconfigurar los métodos de intervención de las instancias decisorias y organizaciones sociales en lo que se refiere a la prevención de la violencia, con planes de acción a nivel micro y meso, en alianza con las colectividades. 

Resumen de la Ponencia:

O objetivo deste trabalho é refletir sobre a proteção das mulheres no combate à violência, sobretudo a de gênero e doméstica; sobre a criação de legislação que estabeleça proteção e direitos e sua efetivação no território brasileiro. Este caminho se fez(az) com as leis de cotas na política, do aborto, de combate a importunação sexual e do feminicido, como forma de garantir direitos e proteçao às mulheres,  tanto na América Latina quanto Brasil. No caso brasileiro, à exceção do voto feminino estabelecido em 1942, outras legislações que conferem direitos e proteção às mulheres surgem a partir dos anos 1980, destaque para a criação das Delegacias Especializadas de Atendimento à Mulher (Deam’s - 1985); Lei Maria da Penha (lei 11.340/2006), objetivando coibir a violência doméstica e familiar por meio de uma legislação mais especifica que imputava ao agressor penas mais duras e à mulher maior proteção. Lei das domésticas (lei 150/2015) que regulamenta o trabalho doméstico. Lei do feminicidio (lei 13.104/2015). Todavia, em terras brasileiras, os dados não corroboram com esta tese de que maior punição e mais legislação diminuem o índice de violência: após 13 anos da instituição da referida lei, os índices não retrocederam. Se tomarmos a primeira década deste século para refletir sobre a taxa de mortes de mulheres por 100 mil habitantes, veremos que apenas em 2007, os números decresceram levemente. No caso particular do Tocantins, estado que conta com 139 municípios e 14 delegacias especializadas de atendimento à mulher (Deam), a situação parece ser o reflexo do cenário latino e nacional. Perspectivas acerca da equidade de salários e tributação do trabalho de homens e mulheres são ainda desafios postos e podem ser um instrumento de redistribuição e reconhecimento dos papeis e ações dos sujeitos nas sociedades. O cenário de violência se acentuou durante a pandemia de covid-19. Se nas epidemias e Ebola e Zika as mulheres foram mais afetadas em virtude da sua condição de pobreza, na Sars-coc-2 ‘a conta’ veio em razão de todos estarem em casa por causa das restrições (lockdown, trabalho remoto, escolarização das crianças, etc) e, como sabemos de antemão, o principal violentador da mulher está, na maioria das vezes, debaixo do mesmo teto e faz parte de sua rede de relações parentais. Além de uma reflexão mais abrangente e de cunho teórico, este texto pretende verificar o caso especifico de uma cidade pequena – Tocantinópolis (TO) - no interior do Brasil, ao analisar os dados da delegacia de proteção à mulher vitima de violência durante a pandemia de covid-19.

Resumen de la Ponencia:

En México, retomando la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2016, 66.1% de las mujeres han experimentado violencia (emocional, sexual, física o económica) alguna vez en su vida; mientras que 4 de cada 10 han sido víctimas de violencia sexual, siendo esta de las que mayores afectaciones tiene para ellas en lo reproductivo, mental, conductual y relacional. La presente investigación se propuso analizar si el nivel de escolaridad de las mujeres tiene relación en que estas sean víctimas de violencia sexual en los distintos ámbitos en que se desenvuelven.           La teoría de género y el modelo ecológico de la Organización Mundial de la Salud (OMS) (OMS, 2002) sirven como referentes explicativos para los resultados de esta investigación, puesto que establecen un vínculo entre los ámbitos en que se lleva a cabo la violencia; planteando que existe una conexión entre las experiencias violentas que viven las mujeres en lo público (comunidad, escuela y trabajo) y lo privado (familia y pareja), habiendo una relación de desigualdad definida por construcciones e ideales que se asignan y norman las conductas de las mujeres, dotando características sociales al sexo. Por otra parte, el modelo ecológico establece que el bajo nivel de escolaridad representa para las mujeres un factor de riesgo que las expone de mayor forma a experimentar este tipo de violencia.            Se seleccionó como fuente de datos la ENDIREH 2016 para identificar a las mujeres que han sido víctimas de violencia sexual alguna vez en su vida; recatando cuatro clases (intimidación y/o acoso, hostigamiento, abuso y violación e intento de violación) en los distintos ámbitos en los que suceden. Posteriormente se calcularon las tasas de prevalencia de las mujeres según su nivel de escolaridad para determinar la relación que existe.            En los resultados se aprecia como las tasas de prevalencia de la violencia sexual y el nivel de escolaridad de las mujeres que la experimentan guardan una relación directa; al analizar estas tasas por cada una de las clases se observa la misma relación en la intimidación y/o acoso, hostigamiento y abuso; guardando una relación indirecta en la violación e intento de violación. En los ámbitos la relación directa se observa en lo público; mientras que no hay un claro patrón en lo familiar y una relación inversa en el ámbito de la pareja. Con lo anterior se concluye que el acceso a mayores niveles de escolaridad tiene una relación variada en cuanto a los ámbitos en que padecen la violencia sexual las mujeres; dentro del espacio público aumenta la prevalencia de las mismas, mientras que en los espacios privados tiene un efecto protector.

Resumen de la Ponencia:

      A violência de Gênero contra mulher que hoje é objeto de estudo das Ciências Sociais teve seu conceito desenvolvido ao decorrer dos anos a medida que os próprios estudos aprofundavam o tema e o reestruturavam continuamente.     Lourdes Maria Bandeira traça em seu texto “Violência de gênero: a construção de um campo teórico e de investigação”, uma evolução histórica dos estudos da violência de Gênero, demonstrando que o seu surgimento ocorreu na década de 70 após as manifestações mais sólidas e concretas do movimento feminista. Neste início, o movimento feminista intitula esse tipo de violência como “violência sexual contra a mulher” e é a partir desse embrião, que o conceito “violência de gênero” começa a dar seus primeiros indícios de existência. (BANDEIRA, 2014)     Ainda segundo a autora, em que pese os estudos e o debate acerca do tema terem se iniciado na década 70, é apenas na década de 80, com a diferenciação de gênero e sexo, que a violência de gênero é estudada como área autônoma do conhecimento. E é só neste momento que os estudos começam a refletir em políticas sociais e legislativas de combate. (BANDEIRA, 2014)     O combate à desigualdade de gênero e à violência de gênero contra mulheres hoje são prioridades nas agendas dos países e da comunidade internacional, sendo o tema de uma das metas da Agenda de 2030 da ONU, por exemplo. Porém esse patamar não foi algo dado, mas como a autora demonstrou em seu texto, foi fruto de constantes reivindicações e lutas sociais. Nesse sentido, como muito bem pontua Joaquim Herrera Flores “Os direitos humanos, mais que direitos ‘propriamente ditos’, são processos; ou seja, o resultado sempre provisório das lutas que os seres humanos colocam em prática para ter acesso aos bens necessários para a vida” (FLORES, 2009, p. 28).     Os ensinamentos do consagrado Herrera Flores demonstram que as conquistas hoje já alcançadas pelo movimento feminista no combate à violência de gênero só foram possíveis graças ao movimento feminista da década de 70, e o caminho ainda distante que a sociedade precisa percorrer até alcançar uma realidade em que as mulheres não morram pelo simples fato de serem mulheres, só será possível pelas lutas embricadas nos dias de hoje.        Referências bibliográficas:     FLORES, J. H. A (re)invenção dos direitos humanos. Florianópolis. Fundação Boiteux, 2009.     BANDEIRA, L. M. Violência de gênero: a construção de um campo teórico e de investigação. Revista Sociedade e Estado, Brasília, v. 29, n. 2, 2014.  

Resumen de la Ponencia:

La violencia en las relaciones de pareja constituye un problema de salud pública que acarrea enormes costos tanto para las víctimas como para la sociedad en general, es un fenómeno que se expresa no sólo en las parejas de adultos/as, sino también en los más jóvenes y-de manera especialmente preocupante- en los y las adolescentes. A pesar de los avances realizados en pro de la igualdad de género no sólo en el ámbito público, sino también en lo privado y lo íntimo, todavía se constata la vigencia de ideas distorsionadas que sirven de sustento a comportamientos violentos, las que vinculan el amor romántico con el control y dominación de un miembro de la pareja sobre otro, y que adquieren nuevas expresiones en las generaciones más jóvenes -por ejemplo, a través del uso de las posibilidades tecnológicas de teléfonos móviles e Internet. Así, lejos de estar en retirada, las creencias y conductas vinculadas a la naturaleza supuestamente pasional del amor romántico parecen continuar vigentes entre las personas más jóvenes. Levantar información y propuestas de intervención basadas en evidencia sobre este problema en los/as adolescentes es particularmente importante debido a que las experiencias y habilidades emocionales aprendidas en esta etapa de la vida son cruciales para el establecimiento de relaciones de pareja sanas en la adultez. Este trabajo se centrará en examinar la importancia de las creencias sobre el amor romántico en el desarrollo y aceptación de conductas de control y/o violencia en las relaciones de pareja en adolescentes chilenos/as. Ello, a partir del examen de la evidencia científica sobre la persistencia de los mitos de amor romántico en jóvenes y su relación con la violencia de pareja, ya que la literatura sugiere que se trata de un fenómeno complejo, en el cual no todos los mismos operarían de la misma manera, así como los resultados preliminares de una revisión sistemática de artículos científicos sobre intervenciones que han abordado este punto y los resultados que se ha reportado. Todo lo anterior, con el propósito de aportar a la discusión sobre el diseño de intervenciones efectivas en este ámbito. Esta ponencia forma parte del proyecto Fondecyt Regular 1210959, “Prevención de la violencia en las relaciones de pareja adolescente: Nuevas tecnologías de la comunicación y creencias distorsionadas sobre el amor y la violencia”, financiado por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo de Chile, ANID. 

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Asumir el desafío de decodificar el sistema expresivo o el código implícito entre pares masculinos en el acto feminicida, conforme ha venido argumentando Rita Segato en su modelo interpretativo, lleva a un giro analítico inusual pero necesario en el contexto boliviano: el análisis social y georreferencial combinado del significado territorial y sacrificial que tiene el feminicidio y el mensaje que se emite desde el acto como desde el territorio transicional. Durante los últimos años, en Bolivia se ha producido un incremento de los casos de feminicidio, los cuales se han ido caracterizando por el aumento de la crueldad y ensañamiento con el cuerpo femenino; pero no solo eso, este trabajo plantea que los territorios (urbanos, periurbanos, periféricos y/o rurales) donde los feminicidios se produjeron o bien donde los cuerpos de las víctimas fueron abandonados, se constituyen en territorios transicionales sacrificiales caracterizados, de acuerdo a lo planteado por Segato, como limbos normativos con ausencia de formas de organización social/comunitarias previas y ausencia de la vigencia efectiva de leyes y valores de los derechos modernos del individuo. Estos territorios transicionales sacrificiales, entendidos como limbos normativos, se constituyen espacialmente en un umbral de tránsito, no solo en complemento a lo planteado por Segato, de un mundo regido por el Sistema de Estatus a un mundo regido por el Sistema de Contrato, sino de tránsito de un Patriarcado de baja intensidad a un Patriarcado de alta intensidad. Así, atravesar este umbral en el territorio transicional sacrificial, genera una tensión o disonancia estructural en el sujeto feminicida atravesado por el Orden Patriarcal que, desde un sistema de economía simbólica del feminicidio, le exige tributar en el cuerpo de la mujer para acceder a su derecho corporativo masculino de transitar de un Patriarcado de baja intensidad a un Patriarcado de alta intensidad; y de ese modo alcanzar una de las máximas de la estructura masculina corporativa planteada por Segato, referida a su carácter jerárquico y una fuerte ideología de prestigio, prestigio ambicionado por el sujeto feminicida en su paisaje mental y constitutivo para la aceptación de sus pares masculinos en la corporación masculina. Para el análisis propuesto en los párrafos anteriores, como base cuantitativa se acude al análisis georreferencial de casos de feminicidio en Bolivia desde la gestión 2013 a la gestión 2021, lo que ha permitido identificar las características geográficas de los territorios transicionales sacrificiales como limbos normativos, así como las características demográficas de los sujetos feminicidas, develando la complejidad del entendimiento del feminicidio como fenómeno social.

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LA PERCEPCIÓN DOCENTE SOBRE EL PROTOCOLO INSTITICIONAL. DIAGNÓSTICO PRELIMINARCon base en el pilotaje del Taller para la Transversalización de la Perspectiva de Género en los planes y programas de estudio en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, se presentan los resultados de un diagnóstico preliminar sobre la percepción del Protocolo para la Atención de la Discriminación y Violencia de Género en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, el cual se ha realizado con el fin de elaborar una estrategia que incida en las prácticas docentes cotidianas a partir de la problematización del tema del acoso y el hostigamientos sexuales y otras prácticas discriminatorias. El diagnóstico se ha realizado a partir de la sistematización de las respuestas a un cuestionario enviado a lxs docentes de las seis licenciaturas que componen la Facultad de Derecho, y un análisis desde la crítica de los procesos de reproducción social y la noción de dispositivo escolar.PALABRAS CLAVE: Transversalización, protocolo, diagnóstico, reproducción social, dispositivo escolar.