Resumen de la Ponencia:

En esta ponencia propongo  trazar y profundizar entorno a tres claves analíticas: los afectos, la vulnerabilidad y los cuidados; estos tres elementos entramados e hilados en un espacio-tiempo histórico concreto: México, el Valle de México, la guerra contra la vida en este país, una guerra que se ha expandido mediante la excusa del narcotráfico y el crimen organizado, y cómo en esta guerra ha habído cuerpxs y comunidades que han sido carne de cañón de los enfrentamientos neoliberales y extractivistas. Esos cuerpos son lxs cuerpxs feminizados, racializados, campesinos, indígenas, afrodescendientes, el cuerpo de la tierra, cuerpxs históricamente violentados por los procesos jerarquizantes del capital-colonialismo-patriarcado, A través de estas tres claves propongo pensar en una apuesta política concreta que surge desde las luchas colectivas entre mujeres frente a la violencia feminicida: el derecho a ser vulnerables y no ser lastimadas por ello. Y esta posibilidad de ser vulnerables como una derecho necesita pasar por el cuerpo, pensado desde Descartes y llegando hasta el Abya Yala con la noción cuerpo-territorio. La vulnerabilidad y los cuidados han estado en la vida cotidiana de la pandemia al darnos cuenta de la radical vulnerabilidad de la vida toda y nuestra necesidad de interdependencia  ¿Qué estamos produciendo para generar aquellas condiciones del derecho a ser vulnerables y cuidar la vida? ¿cómo estamos cuidando? ¿cómo estamos haciendo todo eso con nuestros cuerpos vulnerables? Esta propuesta de ponencia surge de mi investigación de maestría con título tentativo: "Políticas afectivas de la piel delgadita: tramas de acompañamiento y trabajo de cuidados colectivos ante las violencias feminicidas para luchar por la vida en un México en guerra" que me encuentro realizando desde el seminario de investigación “Entramados Comunitarios y Formas de lo Político” de la BUAP. 

Resumen de la Ponencia:

Las ciudades implican una forma de organización específica donde incorporamos formas de hacer, ser y sentir en la urbe, definidas también por nuestras posiciones sociales, que nos permiten significar al espacio y a nosotras mismas.  En la diversidad de condiciones que nos atraviesan como sujetos sociales, las mujeres nos situamos en la ciudad de manera distinta a otros grupos, y nuestra vivencia está marcada en gran medida, por la violencia experimentada en los espacios públicos durante nuestra movilidad cotidiana. Esta violencia, suscitada de diversas formas, nos lleva a sentir y actuar en la ciudad, a partir de la percepción de alerta. Varias teóricas sobre la urbe han expuesto que es un espacio masculinizado (Pérez y Gregorio, 2020) construido por y para hombres, donde nuestra experiencia está marcada por la dominación masculina. Mi propuesta es que esta forma de dominación en la ciudad, se expresa en el uso,  autopercepción y significación de nuestros cuerpos tras una agresión, tanto desde la vulnerabilidad, como desde las resistencias. ¿Qué nos hace ser conscientes de nuestro cuerpo, identificarlo como propio? ¿Cómo se cambia o fortalece una mirada sobre él después de una agresión en nuestro transitar? para muchas, un tocamiento, una mirada lasciva, una vulneración de cualquier tipo, deja una especie de marca invisible, material y emocional en el cuerpo, que permanece y que no sólo modifica nuestra forma de vivir en la ciudad, sino también lleva a (re)pensar nuestro cuerpo y nuestra relación con él.Puede referirse como una especie de memoria corporal o un centro que conecta la dimensión de lo físico con las emociones y con la consciencia de nuestro cuerpo. Con base en esto, mi intención es señalar algunos ejes reflexivos en torno a la forma en que las mujeres significamos y sentimos el cuerpo en condiciones como las señaladas, partiendo de miradas teóricas que reconocen a éste como capaz de ser dotado de sentido pero también, en un papel activo, de construirlo (Mora, 2008), entendiendo que una reflexión de la corporalidad no puede separar la materialidad de lo simbólico, ni dejar de lado el tacto y lo sensorial, conectado a las emociones. En la movilidad urbana de las mujeres, una agresión al cuerpo puede llevarnos a sentipensarnos corporal, emocional y reflexivamente, de otras maneras. Más que enfocar un resultado acabado, trato de sentar bases teóricas que permitan mirar esto de manera analítica. Mora, A. (2008) “Prácticas, representaciones y experiencias: propuestas teórico-metodológicas en investigaciones socio-antropológicas sobre el cuerpo.” en Memoria Académica . La plata, Argentina. Pp. 1-22. Pérez Sanz, P. y Gregorio Gil C. (2020) El derecho a la ciudad desde la etnografía feminista: politizar emociones y resistencias en el espacio urbano. En Revista INVI Vol. 35, Num. 99. Santiago. Pp. 1-33 

Resumen de la Ponencia:

Pese al progresivo aumento de la participación de las mujeres en el espacio público, estas enfrentan cotidianamente múltiples discriminaciones y violencias que les impiden desplazarse con libertad y seguridad en el mismo. Una de estas discriminaciones y violencias la constituye el acoso sexual callejero, una expresión del poder y control ejercida mayormente por hombres contra mujeres, sus cuerpos y su sexualidad que, a pesar de lo extendida y de sus efectos negativos, ha sido invisibilizada, naturalizada y escasamente investigada y ha estado ausente de las agendas para la igualdad.El estudio “Percepciones y vivencias de jóvenes estudiantes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo sobre acoso sexual callejero” tuvo como objetivos generales: 1) Caracterizar las percepciones y  vivencias de jóvenes, mujeres y hombres, estudiantes de la UASD sobre acoso sexual callejero; 2) Identificar elementos para la formulación de políticas públicas con enfoque de género que apunten a ampliar el ejercicio ciudadano de las mujeres en el espacio público de la ciudad. Es un estudio de enfoque cualitativo, realizado con la técnica del grupo focal. El estudio reveló que las formas de acoso sufridas por las jóvenes estudiantes y otras mujeres constituyen un amplio abanico y que algunas de sus expresiones son naturalizadas por algunas y algunos jóvenes. Los sentimientos y reacciones experimentados son diversos, así como los efectos del acoso sobre ellas y las estrategias que emplean para afrontarlo; asimismo, las percepciones de las y los jóvenes estudiantes sobre sus causas y las ideas que tienen estas/estos para su abordaje. 

Resumen de la Ponencia:

Frente a la ausencia de teoría y abordajes sociológicos del cuerpo durante el transcurso por la licenciatura, y fruto del interés personal en la Sociología del Cuerpo y en la configuración de la Sociología como campo disciplinar, se plantea la siguiente pregunta de investigación: ¿cómo se han aproximado, las/os investigadoras/es, al cuerpo desde la perspectiva sociológica en Uruguay, qué inserciones profesionales tienen, qué sentido y valoración le atribuyen a la experiencia de producción de conocimiento y qué lugar ocupan las investigaciones sociológicas del cuerpo en el acumulado de producción de conocimiento sociológico a nivel nacional?El recorrido teórico comienza por la sociología Weberiana afín de enmarcar el abordaje y la interpretación de los datos a partir de la noción de comprensión. Se retoma la discusión acerca de las identidades sociales en relación a la existencia de sociólogas/os del cuerpo en Uruguay y a cómo se trazan las líneas de similitudes y diferencias que orientan un interés común. Se aclaran algunas nociones básicas de fenomenología para ahondar en la experiencia y problematización del propio cuerpo del/ de la investigador/a, así como se retoman algunos autores claves para el abordaje de la Sociología del Cuerpo como tal. Se culmina por contextualizar a la disciplina sociológica en un marco institucional, que delimita y limita las especialidades de conocimiento, a partir de la noción Bourdiana de campo. Se utilizó una metodología de enfoque cualitativo, y se realizaron 25 entrevistas en profundidad a través de la plataforma Zoom durante el año 2021. Se llevó adelante la técnica de muestreo por conveniencia, seleccionado tres sociólogas con diferentes inserciones profesionales, así como también se seleccionaron las personas egresadas de sociología que hayan realizado una investigación en cuyos descriptores se encuentren las palabras: cuerpo, cuerpos, corporalidad, dimensión corporal. Posteriormente, se utiliza el muestreo por bola de nieve. Se trabajó, también, con 6 documentos institucionales de sociólogos referentes de Uruguay que aborden aspectos de la sociología como disciplina.Respecto a las conclusiones, se confirma y complejiza la hipótesis de investigación: en Uruguay la Sociología del Cuerpo se encuentra poco explorada y reconocida. A pesar de no existir un grupo consolidado como tal, la distinción nosotrxs/ellxs, se da, sobre todo, a partir del menosprecio de la rama mayoritaria y dominante en la disciplina. Se concluye que es pertinente desarrollar y trabajar la Sociología del Cuerpo en Uruguay, así como se menciona la relevancia particular que adquiere en el contexto de pandemia. Además de la existencia de trabas institucionales en la generación de conocimiento sociológico sobre el cuerpo en Uruguay, es necesaria a una problematización del mismo en nuestra sociedad para que el debate cobre interés público y se torne imposible negar, desde las ciencias sociales, su caudal heurístico.

Resumen de la Ponencia:

Este artigo tem por objetivo compreender possíveis sentidos e significados da pandemia do Covid 19 sobre a noção de corpos humanos outsiders no Brasil, com base em alguns desdobramentos teórico-metodológicos do paradigma da corporeidade de David Le Breton e da noção de “levar o outro a sério” de Tim Ingold. Considerando dois casos empíricos, de um corpo indígena e da situação de corpos humanos jogados em valas abertas, refletimos sobre os sentidos atribuídos e a forma como os corpos outsiders são tratados durante a pandemia. Ponderamos que a pandemia, à medida que corresponde a uma postura que avança consoante políticas individualistas do corpo, que se mesclam sobre um profundo desinteresse pela vida coletiva, colabora para revelar uma face do processo civilizatório que se barbariza em seus meandros. Mais do que uma resposta ‘sanitária’, precisamos de uma resposta humanitária, que possa fincar e estabelecer relações mais solidárias que ultrapassem a condição individual, considerando as distintas corporeidades e levando os outros – no sentido antropológico do termo – a sério. 

Resumen de la Ponencia:

En este trabajo las autoras reflexionamos y analizamos a la etnografía en la sociología y la antropología, como un enfoque metodológico  para la  construcción de conocimiento. Las principales técnicas de investigación etnográfica que se utilizan frecuentemente en la investigación cualitativa son: la entrevista, la observación participante que se registra en un diario de campo, recursos visuales como video y/o fotografía, entre otros. Consideramos que la etnografía, se ha convertido en un sitio muy oportuno para el registro de las emociones. En este sentido, nos parece necesario entablar un diálogo para debatir sobre la etnografía en clave emocional, su potencial para identificar y reflexionar sobre similitudes y diferencias en entender y practicar la etnografía en ambas disciplinas. Proponemos adentrarnos al campo de las emociones y así, intersectar la etnografía y la dimensión emocional. Para hacer este recorrido planeamos la revisión de textos clásicos tanto en sociología  - Whyte (1971), Duneier (1999) y Loic Wacquant como en antropología, Nancy Shceper-Hughes (1992), Phillipe Bourgois (2003) y Rosana Guber (2011) -, por mencionar solo algunos. Estos trabajos no se detuvieron en las emociones como objeto de estudio o como parte de la investigación pero las características de sus trabajos de campo, permiten reflexionar en la importancia del análisis de las emociones y el cuerpo como son las relaciones afectivas que se establecen en campo. Las aportaciones metodológicas de las y los autores de ambas disciplinas son centrales para identificar elementos que contribuyen a la realización de etnografías en clave emocional y traspasar las fronteras disciplinares. Así, se puede plantear la idea de una nueva forma de realizar trabajo de campo y etnografía (Jacobo, 2022) en donde se contemple la dimensión emocional y corporal/sensorial (Pelaez, 2020).  

Justificación del Panel:

Después de algunos años de retraso, motivado por la dramática situación del Covid 19, en junio de este año se celebra el XIV Congreso Nacional de Sociología, organizado por la FES (Federación Española de Sociología), en el que han sido aceptadas, finalmente, 18 propuestas. La presente presentación constituye una aproximación sintética sobre los estudios sociales de las emociones en el marco del congreso aludido e, indirectamente, acerca de la situación de la investigación sobre los cuerpos y emociones en España. Concretamente, estas investigaciones  tratan sobre las imágenes, las emociones y el autoritarismo durante la pandemia y, particularmente, en el primer estado de alarma; sobre la cartografía de la soledad no deseada o acerca de las diferencias con las que asumen la soledad los varones y las mujeres; sobre la felicidad en España o el pesimismo en Europa; acerca de las corporalidades y las emociones en los equipos deportivos y en los grupos de baile; sobre el trato de los clientes de la hostelería y acerca de la gestión emocional en grupos de investigación de excelencia científica; acerca de cómo ser buenas madres en el contexto del transnacionalismo y sobre la construcción del nosotros en la pareja; acerca de la inmigración hondureña en la ciudad de México y sobre el proceso electoral en México 2018; y sobre la relación entre vivienda y emociones y entre éstas y el análisis del discurso. Como se ve, todos estos estudios constituyen una buena imagen de la vitalidad de la Sociología de los Cuerpos y de las Emociones, así como de la variedad y riqueza temática abordada por diversos investigadores que indican el crecimiento experimentado por la subdisciplina.

Resumen de la Ponencia:

Las emociones, los afectos, los sentimientos y, en general, todo lo relativo a la vida afectiva de las personas, ha constituido un campo de reflexiones, debate, definición y análisis, en el occidente del mundo, desde, por lo menos, el pensamiento griego clásico. En este artículo nos proponemos describir las maneras generales a través de las cuales, las emociones han sido estudiadas desde tres disciplinas sociales, a saber, la sociología, la psicología y la antropología. Nos acercamos también al estudio de las emociones y los afectos, que más recientemente se viene desarrollando desde el campo de la comunicación.En las ciencias sociales grosso modo, podemos decir que las emociones han sido estudiadas a partir de al menos tres grandes perspectivas: una que las vincula con el cuerpo -de ahí la importancia de dedicar un apartado específico al tema de lo corporal-, otra con la cognición (AHMED, 2015) siguiendo la separación clásica cartesiana entre pensamiento y emoción[1], y, una tercera que podemos llamar el estudio sociocultural de las emociones y que es, quizás, la que goza de mayor presencia y legitimidad en el ámbito de la investigación social[2].Nosotras, sin desconocer la importancia histórica y vigente que nuestra biología tiene en lo que sentimos, consideramos que las emociones son también (y especialmente) una construcción sociocultural y, por tanto, estructuralmente vincular, relacional, y son creadas a través del lenguaje, de los significados socialmente compartidos, de aquellos hegemónicos y de los que disputan su preeminencia. Es justamente en esta dimensión donde las emociones se entrelazan con la comunicación y adquieren, además, su dimensión política.Además de las revisión de las grandes perspectivas de las tres disciplinas ya mencionadas, interesan las propuestas inter y transdisciplinarias. En este sentido, nos parece relevante cerrar el artículo mencionando los aportes y particularidades del Giro Afectivo, por un lado, y la importancia de incorporar al cuerpo en este tipo de análisis del mundo social, desde una mirada afectiva y emocional, que es también una mirada corpórea. [1] Junto a Descartes otros teóricos ampliamente conocidos que abrazaron esta perspectiva fueron David Hume, Jeremy Bentham y William James (AHMED, 2015; DAVIES, 2015).[2] Evidentemente otras tipologías son posibles. Bolaños (2015) por ejemplo, realiza una revisión histórica de lo que define como la incorporación de las emociones en las ciencias sociales durante el siglo XX en los contextos norteamericano y europeo, aduciendo que dicha incorporación se da especialmente cuando la sociología y la antropología se distancian de la perspectiva positivista precedente que ubica como un antecedente, en los 4 momentos que analiza.

Resumen de la Ponencia:

En sus cuatro décadas de desarrollo, las sociologías del cuerpo, de las emociones, las sensibilidades y los afectos, han logrado consolidar su campo y arraigar la pertinencia de estudiar la dimensión sensorio-afectiva, en sentido amplio, considerando sus condiciones de producción, las funciones que cumplen, así como los efectos sociales que producen. El presente trabajo parte de la convicción de que este tipo de ejercicio analítico es susceptible de extenderse al estudio de las producciones clásicas y contemporáneas de la teoría social. En este sentido, la apropiación de los principales aportes de los autores clásicos y contemporáneos de la sociología y la profundización de algunos de sus supuestos de trabajo, forman parte de los cimientos sobre los que se erige la actual sociología de las emociones, los cuerpos y los afectos.  Dentro de este marco de intereses, en la presente ponencia se ensaya una ejercicio de aproximación al análisis de las relaciones entre los conceptos de poder, dominación simbólica e illusio en la obra del sociólogo francés Pierre Bourdieu (1930-2002), colocando, como una variable central a la dimensión afectiva. Se busca, en específico, identificar el papel y peso que las emociones y los afectos adquieren dentro de la explicación bourdiana sobre los procesos de dominación simbólica y la producción afectiva del orden social, cuando se introduce la noción de illusio como una categoría eje del análisis.En sentido estricto, Bourdieu no desarrolló trabajos específicos sobre las emociones y los afectos. No obstante, como esperamos demostrar, la dimensión emocional forma parte integral de su perspectiva y constituye una vía de acceso a sus reflexiones sobre el poder. Con base en esta premisa, el objetivo de este trabajo es analizar la perspectiva bourdiana sobre el poder y la dominación simbólica, tomando como base la noción de illusio. ¿Puede la illusio entenderse como un mecanismo de poder y dominación simbólica que involucra formas de expresión emocional? A partir del análisis realizado, sostenemos una respuesta afirmativa a esta pregunta, asumiendo a la illusio como un principio de percepción, inversión emocional, adhesión y creencia por el que los agentes se comprometen afectivamente con la lógica asimétrica de los campos en que participan, movidos por mecanismos de tipo aspiracional desde los que indirectamente terminan legitimando el orden social.

Resumen de la Ponencia:

O presente resumo tem como intuito analisar o amor romântico presente nas telenovelas como um sistema de sexo-gênero por meio de uma construção sociocultural, bem como um aparato semiótico. Dessa forma, quando é apresentada uma representação do masculino e do feminino em um produto cultural, ali são demonstrados o conjunto de atributos do que se entende por feminino e masculino dentro de uma determinada cultura (LAURETIS, 1987). Isto posto, quando o amor é exibido como um personagem central dos enredos melodramáticos à maneira como os papéis de mulheres e homens são desenvolvidos, está inserido também no sistema de representação gendrada em sua totalidade, isto é, status, função, anseios, sentimentos, aparência, etc.Nesse sentido, o amor nas telenovelas é representado como um sentimento sublime, indescritível, capaz de superar diferenças de classe, raça e quaisquer outros empecilhos que se sobreponham à relação romantizada. Essas narrativas têm um caráter higienizador sobre como “deve ser” o amar, assim como deve ser o comportamento feminino e masculino em relações amorosas (TIMM & PEREIRA, 2020). Portanto, a partir da análise da construção do amor romântico como parte do padrão de feminilidade ideal, compreende-se também como se dá as limitações ao corpo feminino dentro da sociedade patriarcal, desde aos padrões de beleza até o comportamento de abnegação das protagonistas de novelas.

Resumen de la Ponencia:

En la actualidad, la centralidad del “cuerpo”, ambos como preocupación, y como objeto de estudio, es irrefutable. Asimismo, la sensibilidad en tanto pieza clave de la estructuración social, constituye parte central de los estudios sociales. Particularmente diversas formas de exploración y modos de entrenamiento constituyen parte central de la vida urbana. Durante la pandemia COVID-19 y el tiempo de confinamiento, este tipo de actividades empezó a ocupar el espacio público, volviéndose más visible. La práctica de yoga forma parte de estas formas, con sus particularidades. A nivel económico, su expansión ha sido vertiginosa. Se reconoce que desde 1990, se viene estableciendo como un negocio que mueve millones (Singleton, 2010). A nivel cultural, su presencia en las grandes ciudades tanto en Europa como en las Américas también es cada vez más evidente. Asimismo, este fenómeno viene reformulando cómo su país de origen, India, la destaca y retoma como parte de su acervo, en un contexto de un gobierno nacionalista (desde el  21 de junio de 2015 se celebra globalmente el Día Internacional del Yoga, cfr. Muñoz y Martino, 2019).Establecido como fenómeno, tanto histórico como contemporáneo, en el campo académico el debate gira en torno a la autenticidad de las prácticas, y sobre la diferencia entre quienes la definen como “yoga postural moderno” (De Michelis, 2004), “yoga transnacional anglófono” (Singleton 2008, 2010), por dar solo dos ejemplos de trascendencia. En relación con ambos aspectos, se abre la reflexión acerca de si se puede trazar una continuidad con el yoga tradicional, o no.Además, a nivel sociológico en particular, se debe considerar en cuanto a su rol dentro de las prácticas y dispositivos de regulación de las sensaciones (Scribano, 2005), dentro de un avance del llamado capitalismo emocional y la “responsabilidad” de la propia felicidad (Ahmed, 2019: 32), dando forma a lo que referimos como espiritualidades neoliberales.  La pregunta que se propone central es ¿De qué modos esto toma forma en el contexto latinoamericano? ¿Qué categorías se aplican y cuáles requieren de una elaboración situada y propia? En el presente trabajo, dentro de este sintetizado contexto, se propone un acercamiento a la experiencia y construcción de las sensibilidades de quienes construyen dicho campo regularmente; explorando su sentido práctico. Desde un abordaje cualitativo, el análisis se basa en entrevistas exploratorias a practicantes en Argentina, y a figuras clave de la arena pública como representantes de escuelas en la Ciudad de Buenos Aires, Argentina, durante 2022.-